martes, 6 de agosto de 2013

Tríada de Mykerinos.

Encuadre:
Obra: Tríada de Mikerinos (Mikerinos con la diosa Hathor y el nomo de Kynópolis).
Género: Escultura de bulto redondo adosada o Altorrelieve casi exento. Grupo.
Material: Roca de diorita.
92,5 cm. Museo Egipcio. El Cairo.
Estilo: Arte egipcio.
Cronología: Imperio Antiguo (2.532-2.504 a.C.).
Otras obras: de la misma época: Estatua del Faraón Mikerinos y su esposa, El Faraón Kefrén entronizado, El Alcalde del pueblo...

Análisis de la obra:

FORMA: estela de piedra (pizarra de color gris), que forma un único bloque con forma de L, en cuya pared vertical encontramos adosadas tres figuras talladas mediante altorrelieve de gran profundidad, mientras la base que da estabilidad al conjunto y muestra algunas inscripciones jeroglíficas. Mide 92 cm de altura.

MÉTODO: obra realizada mediante talla directa sobre la piedra, con pulimentado posterior.

DESCRIPCIÓN GENERAL: la obra muestra al faraón Mikerinos entre dos divinidades femeninas. El monarca aparece representado con la corona blanca del Alto Egipto, viste con un faldellín plisado que deja al descubierto su torso, brazos y piernas. Lleva también la típica barba postiza característica de la realeza egipcia. Mikerinos se encuentra en actitud de avanzar, para lo que adelanta su pierna izquierda, mientras su musculatura queda muy marcada.
Las dos divinidades femeninas que acompañan al faraón muestran entre sí algunos rasgos semejantes: ambas se visten con sencillas túnicas casi transparentes que dejan entrever diversos rasgos anatómicos y poseen melenas que caen por delante del cuello para llegar casi hasta los pechos.
 A la derecha de Mikerinos se halla la diosa Hathor, cuya cabeza se remata con cuernos de vaca, entre los cuales se muestra el disco solar. A la izquierda del rey encontramos a la diosa protectora del nomo de Cinópolist, sobre cuya cabeza se coloca su emblema característico. Existe además otra pequeña diferencia entre las dos diosas: mientras Hathor avanza levemente su pie izquierdo, en actitud de inicio de la marcha, la otra diosa se mantiene por completo estática, con los pies juntos.
En el análisis de conjunto podemos encontrar las características propias de la escultura egipcia: -Hieratismo, es decir, la rigidez con la que aparecen los personajes.
-Ley de la frontalidad: que consiste en representar el conjunto para ser contemplado de frente, preferentemente. En este caso es un grupo en altorrelieve, no siendo figuras de bulto redondo.
-Canon: Las figuras están bien proporcionadas mostrando gran armonía entre sus partes, siendo el canon de la figura de 18 puños, distribuidos de la siguiente manera: dos para el rostro, diez desde los hombros hasta la altura de las rodillas y los seis restantes para piernas y pies.
-La indumentaria es de gran sencillez.
-Geometría. Las tres figuras muestran evidentes rasgos geométricos: los brazos, pegados al cuerpo y los puños cerrados.

Análisis Iconográfico.

Los elementos simbólicos presentes en este grupo resultan bastante evidentes. En primer lugar, la posición central del faraón entre dos diosas nos remite a la concepción del monarca egipcio como otra divinidad más.
Mikerinos, cuyo reinado se sitúa a mediados del III milenio a.C., es el último de los grandes faraones de la IV Dinastía, que supone tanto la consolidación del Imperio Antiguo egipcio como el incremento del poder real en el país, del cual son prueba evidente las colosales pirámides de Giza.

La tríada forma parte de un amplio conjunto de obras semejantes en las que el mismo faraón aparece acompañado siempre de dos divinidades, que varían en los distintos ejemplares, aunque la representación dela diosa Hathor junto al faraón es prácticamente constante.