Encuadre:
Obra: Tríada de Mikerinos (Mikerinos con la diosa Hathor y el nomo
de Kynópolis).
Género: Escultura de bulto redondo adosada o Altorrelieve casi
exento. Grupo.
Material: Roca de diorita.
92,5 cm. Museo Egipcio. El Cairo.
Estilo: Arte egipcio.
Cronología: Imperio Antiguo (2.532-2.504 a.C.).
Otras obras: de la misma época: Estatua del Faraón Mikerinos y su
esposa, El Faraón Kefrén entronizado, El Alcalde del pueblo...
Análisis de la obra:
FORMA: estela de piedra (pizarra de color gris), que forma un
único bloque con forma de L, en cuya pared vertical encontramos adosadas tres
figuras talladas mediante altorrelieve de gran profundidad, mientras la base
que da estabilidad al conjunto y muestra algunas inscripciones jeroglíficas.
Mide 92 cm de altura.
MÉTODO: obra realizada mediante talla directa sobre la piedra, con
pulimentado posterior.
DESCRIPCIÓN GENERAL: la obra muestra al faraón Mikerinos entre dos
divinidades femeninas. El monarca aparece representado con la corona blanca del
Alto Egipto, viste con un faldellín plisado que deja al descubierto su torso,
brazos y piernas. Lleva también la típica barba postiza característica de la
realeza egipcia. Mikerinos se encuentra en actitud de avanzar, para lo que
adelanta su pierna izquierda, mientras su musculatura queda muy marcada.
Las dos divinidades femeninas que acompañan al faraón muestran
entre sí algunos rasgos semejantes: ambas se visten con sencillas túnicas casi
transparentes que dejan entrever diversos rasgos anatómicos y poseen melenas
que caen por delante del cuello para llegar casi hasta los pechos.
A la derecha de Mikerinos
se halla la diosa Hathor, cuya cabeza se remata con cuernos de vaca, entre los cuales
se muestra el disco solar. A la izquierda del rey encontramos a la diosa
protectora del nomo de Cinópolist, sobre cuya cabeza se coloca su emblema característico.
Existe además otra pequeña diferencia entre las dos diosas: mientras Hathor
avanza levemente su pie izquierdo, en actitud de inicio de la marcha, la otra
diosa se mantiene por completo estática, con los pies juntos.
En el análisis de conjunto podemos encontrar las características
propias de la escultura egipcia: -Hieratismo, es decir, la rigidez con la que
aparecen los personajes.
-Ley de la frontalidad: que consiste en representar el conjunto
para ser contemplado de frente, preferentemente. En este caso es un grupo en
altorrelieve, no siendo figuras de bulto redondo.
-Canon: Las figuras están bien proporcionadas mostrando gran
armonía entre sus partes, siendo el canon de la figura de 18 puños,
distribuidos de la siguiente manera: dos para el rostro, diez desde los hombros
hasta la altura de las rodillas y los seis restantes para piernas y pies.
-La indumentaria es de gran sencillez.
-Geometría. Las tres figuras muestran evidentes rasgos
geométricos: los brazos, pegados al cuerpo y los puños cerrados.
Análisis Iconográfico.
Los elementos simbólicos presentes en este grupo resultan bastante
evidentes. En primer lugar, la posición central del faraón entre dos diosas nos
remite a la concepción del monarca egipcio como otra divinidad más.
Mikerinos, cuyo reinado se sitúa a mediados del III milenio a.C.,
es el último de los grandes faraones de la IV Dinastía, que supone tanto la consolidación
del Imperio Antiguo egipcio como el incremento del poder real en el país, del
cual son prueba evidente las colosales pirámides de Giza.
La tríada forma parte de un amplio conjunto de obras semejantes en
las que el mismo faraón aparece acompañado siempre de dos divinidades, que
varían en los distintos ejemplares, aunque la representación dela diosa Hathor
junto al faraón es prácticamente constante.