En la imagen observamos la representación del entierro del Señor Orgaz.
Al entierro han asistido dos Santos, como lo son San Agustín y San Esteban, que descienden a la tierra para hacer acto de presencia en este acto.
En el protagonista Orgaz, observamos el rostro pálido del difunto y como detalle se encuentra vestido con la armadura propia del siglo XVI.
La obra consta de dos planos, separados por un rompimiento de gloria, que separa el mundo espiritual del mundo terrenal. Este último se encuentra en la parte inferior de la obra, y en ella se representa el entierro y la asistencia de los distintos personajes al acto. Entre estos personajes, conocemos de una posible representación del propio autor, es decir, del Greco. También sabemos, que el personaje de menor tamaño que se encuentra con túnica negra en la parte izquierda se trata de una representación del hijo del Greco, de Juan Manuel, y este, señala con el dedo lo que sucede:
En la parte superior de la obra, representando el mundo espiritual, nos encontramos con la presencia de la Deesis. Jesús, el persona principal viste con túnica blanca como símbolo de pureza. En un plano inferior se encuentran la Virgen y San Juan.
A la izquierda de la Virgen, nos encontramos con la presencia de San Pedro, que se reconoce fácilmente porque en sus manos porta unas llaves.
En este mundo, se representa el ascendimiento del alma del difunto al cielo.
Esta obra fue creada en 1586-1588 por Domenico Greco. Se trata de un óleo sobre lienzo. Su valor era de 13200 reales y consta con unas dimensiones de 460 x 360 cm. Se ubica en la parroquia de Santo Tomé, en Toledo.
Del Greco, cabe nombrar obras como el expolio de Cristo, y el Martirio de San Mauricio y la legión tebana.