La obra que a continuación vamos a comentar es una escultura que se encuentra hoy en día en el Neues Museum
de Berlín. Ésta fue esculpida durante el Imperio Antiguo egipcio, en concreto, en el 1350 a.C., pero fue descubierta en 1912 por un
arqueólogo alemán llamado Borchard.
Es una obra escultórica, exenta o de bulto redondo, que representa la cabeza, el cuello y los hombros de una mujer coronada por una gran tiara tratándose, por lo tanto, de un retrato en forma de busto. En este caso, es el busto de Nefertiti, que fue la principal esposa de Amenofis IV y cuyo nombre significa "La bella ha llegado".
Mide aproximadamente medio metro. La obra está esculpida en piedra caliza, en este caso policromada y con incrustaciones de cristal en los ojos para darle mayor realismo a la
escultura, aunque la incrustación del ojo izquierdo se ha perdido. La policromía, naranja para el rostro, azul, ocre y verde para la tiara y
el cuello, da gran viveza a la obra, conservada casi de manera milagrosa
"in situ" hasta su descubrimiento. Presenta un tallado suave con alternancia de suaves curvas, líneas rectas y planos, lo que consigue que la obra muestre una gran armonía. Otra característica es que la reina presenta maquillaje que podemos observar en la línea de sus ojos y en el carmín de sus labios y un cutis terso y liso.
Como únicos adornos la reina porta un gran collar de hojas de sauce, así como una hermosa
tiara que fue diseñada para ella expresamente, y en su rostro sereno y simétrico muestra unos rasgos de gran
belleza y finura. La reina aparece representada mirando al frente en un
gesto distante e inexpresivo, aunque transmite serenidad y realeza al
mismo tiempo.
Esta obra es excepcional no sólo por su indudable belleza sino
precisamente por lo que de novedoso presenta en un estilo artístico,
como el egipcio, tan poco dado a los cambios y que permaneció casi
inmutable a lo largos de sus tres mil años de historia. También destaca que no tiene nada que ver esta bonita escultura, cuya finalidad
seguramente sería privada al servir de modelo al escultor para otras
obras, con los relieves que representan a la reina acompañada del faraón
y sus hijos.
De la reina Nefertiti y su destino
poco se sabe desde que su nombre desapareció en los textos siendo objeto
de discutidas interpretaciones e hipótesis aún no confirmadas. El propio busto de la reina Nefertiti y las circunstancias que rodearon
su descubrimiento y posterior salida hacia Berlín, donde hoy en día se
encuentra expuesta, ha sido objeto de discusiones y debates siendo en
multitud de ocasiones reclamadas por el gobierno egipcio para su
devolución.