domingo, 18 de octubre de 2015

Hesiré



Nos encontramos frente a una obra escultórica del arte egipcio. Para ser más exactos, estamos frente a Hesiré , composición que podemos datar hacia el (2668-2589 a.C.) . Es una escultura de bajo relieve adosado, y representa a una figura humana de cuerpo entero, de sexo masculino, que se encuentra de pie.
El relieve se encuentra realizado en madera, que está sin policromar, con función de puerta en su tumba. El tema utilizado en esta composición es de tipo funerario, aunque también tiene una función en parte civil, ya que recuerda al difunto que allí yace. El personaje representado mantiene en sus manos las herramientas de su oficio típico, el de escriba. Esta realización mide 114 cm.

En esta obra podemos ver representado el canon de belleza ideal egipcio del cuerpo humano, en el que se sintetizan tres conceptos: la armonía de las proporciones, la ley de la frontalidad y la visión rectilínea. Estos conceptos, se consideraban de origen divino.

Según los egipcios, el cuerpo humano debía estar armónicamente proporcionado, ofreciendo un acorde perfecto entre sus partes. El puño es el módulo regulador, y establecieron la longitud perfecta del individuo en 18 puños, distribuidos de la siguiente manera: 2 para el rostro, 10 desde los hombros hasta la altura de las rodillas y los 6 restantes para las piernas y los pies.

Otro de los fundamentos de la escultura egipcia fue la ley de la frontalidad. Consistía en representar la línea recta de los hombros y de las caderas. Ello permitía dividir verticalmente la figura en dos mitades, que se solapaban, sin desviarse del eje central.

La última de las normas es la llamada la visión rectilínea. Para los egipcios, todas las figuras estaban compuestas a partir de cuatro puntos: uno frontal, otro dorsal y dos laterales. Acto seguido, y conforme a esta visión, despiezaron la imagen y ensamblaron sus partes en un puzzle por el lado más representativo. El resultado fue un plano en el que se insertaba de frente, el ojo y el tronco, y de perfil, la cabeza y las extremidades.

Diseño cuadriculado de la imagen anterior con las reglas de representación estética del relieve egipcio: canon de 18 puños, ley de la frontalidad y visión rectilínea:




En cuanto al contexto histórico, hay que apuntar que la obra pertenece a la III dinastía del Imperio Antiguo. Fue realizada por los escribas del rey Zoser, segundo faraón de la 3º dinastía, cuyo reinado duró aproximadamente 30 años. 
Actualmente, este relieve se encuentra en el Museo del Cairo, en Egipto.

Por último, aquí podéis ver  un vídeo donde se hace un breve resumen de la escultura egipcia: 


Semiespeo de Hatshepsut


SEMIESPEO DE HATSHEPSUT:

Estamos ante un templo de origen egipcio. Es el templo de Hatshepsut, que es la única mujer faraón de la historia de Egipto. Mandó erigir a su arquitecto y ministro Senenmut, en el acantilado tebano de Deir el Bahari, un semiespeo formado por tres terrazas comunicadas por rampas, finalizándose su construcción en el año 1458 a.C. 




Este semiespeo tiene tres niveles sucesivos: un vasto patio y dos terrazas, la segunda más pequeña que la primera; la comunicación entre ambas es mediante rampas, que dan paso a las capillas rupestres de Anubis, de Hathor, de la propia reina y de Amón. Los desniveles están ocupados por pórticos que hacen de fondo tanto el patio como en la primera terraza.



Tras la entrada se accede a la primera terraza, un gran patio rodeado de muros bajos y largos con un doble pórtico. Decorado con relieves que representan barcazas construidas para transportar los obeliscos. En esta primera terraza había 2 estanques con forma de T que contenían plantas ornamentales.

Una rampa ascendente, con el león que protege el nombre de la reina, llega hasta la segunda terraza, con un pórtico formado por 2 filas de 22 pilares cuadrados con escenas del nacimiento, educación y coronación de la reina. Existe, además, a la derecha otro pórtico inacabado con 15 columnas y 4 nichos.
En el ángulo entre ambos pórticos se encuentra la capilla de Anubis con un vestíbulo y 3 santuarios, decorada con escenas de Thutmose I y Hatshepsut haciendo ofrendas a Anubis, Amón, Ra-Horajty.
En el extremo izquierdo se encuentra la capilla de Hathor excavada en la roca, compuesta de 2 salas hipóstilas. Una de las salas consta de columnas hathóricas y la otra de columnas acanaladas. El templo está decorado con escenas de fiestas en honor a Hathor y ofrendas de la reina a los dioses, así como decoraciones celestes.
La tercera terraza contenía 22 columnas precedidas de pilares osiríacos. En este nivel, en el lado sur, a la izquierda de la terraza, se encuentra la capilla de Thutmose I y la cámara de ofrendas de la reina, excavada en la roca. En el lado contrario, al norte, están las salas dedicadas a Ra-Horajti, con un vestíbulo con nicho sobreelevado y un patio interior con ara solar, y las de Amón y Amonet.
La última estancia del templo, el santuario, consta de 3 salas con nichos para colocar objetos de culto, la primera estaba destinada a albergar la barca sagrada. En esta hay decoraciones de la reina, Thutmose III y  Neferura haciendo ofrendas a Thutmose I y II y a la reina Ahmes Nefertari.
En el lado occidental de la parte trasera de la sala se encontraban una serie de nichos que contenían estatuas de la reina y una entrada en el muro conducía al santuario. Desde el segundo patio se accedía a unas capillas que estaban dedicadas a Anubis y Hathor.