Las ciudades de nueva planta se trazaron sobre un plano geométrico,
inspirado en el urbanismo helenístico y experimentado con éxito en
los campamentos militares. El siguiente paso era delimitar las dos
calles mayores: el cardo, que
se cruzaba en ángulo recto con el decumanus,
formando en su intersección un espacio público: el foro. Estas vías
coincidían con las cuatro puertas que se abrían en la muralla,
orientadas hacia los puntos cardinales. Luego se cortaban
longitudinal y transversalmente los cuadrantes interiores por
arterias secundarias, dando origen a manzanas regulares destinadas a
viviendas. El diseño urbano se convertía en un confortable damero,
proyectado en el subsuelo a través de un sistema de cloacas con el
fin de canalizar aguas residuales. En las afueras se situaron las
necrópolis con una rica tipología de tumbas, entre las que
sobresale el columbario,
con nichos para depositar cenizas.
La utilización de nuevos materiales como el hormigón permitió
elevar muros gruesos y voltear arcos, bóvedas y cúpulas. La
ligereza, resistencia y bajo coste del ladrillo lo convirtió en el
material idóneo para los paramentos, que en los edificios
emblemáticos se revestían con placas de mármol. Otras
particularidades del genio constructivo romano serían el
descubrimento del ábside como eje de simetría horizontal y de la
cúpula como eje simetría vertical. Se empleo el dórico en la
planta baja por su robustez, seguido en los pisos superiores por el
jónico, corintio y un módulo específicamente romano, el compuesto.
Planta de una ciudad romana:
• Foro.
Es
una espaciosa plaza rectangular abierta en el corazón de la ciudad,
donde se manifiesta el poder político, comercial y religioso. Los
edificios que representaban estas tendencias eran la curia, la
basílica y el templo. A la entrada y en el centro de este
privilegiado espacio social latía el protagonismo glorioso de sus
habitantes, visibles en sus arcos triunfales y columnas honoríficas.
La estatua del emperador presidía el lugar y en los soportales se
establecían tiendas.
• Curia.
Es el lugar de reunión del Senado y en sus aledaños se alzaban las
tribunas públicas desde donde los oradores dirigían los mítines al
pueblo.
• Basílica.
Servía de bolsa de comercio y tribunal de justicia. Su aspecto es
el de un rectángulo, dividido en tres naves interiores por hileras
de columnas; la cabecera se remata por un ábside y enfrente se abre
la puerta de acceso. Un diseño que se convirtió en el predilecto de
culto cristiano tras la Paz de la Iglesia.
• Templo.
Derivó del griego, pero presenta características propias, como la
elevación sobre un podio con escalinatas y la invasión del espacio
sacro por la cella,
hasta el punto de embutir en sus muros las columnas perimetrales.
La
Maison Carrée
resume esta fórmula, que compaginará con la planta central en el
Panteón de
Roma. Fue
germinado por Agripa en el 27 a.C ,sin embargo, varios incedios
obligaron a Adriano a reconstruilo un siglo después. Está precedido
por un pórtico columnado, que deja paso a la gran rotonda cerrada
por una cúpula acasetonada, cuya altura de 43,50 metros es idéntica
al diámetro de la base.
Imagen de la Maison Carrée:
• Circo.
Era el lugar donde se desarrollaban carreras de carros, tenía
capacidad para 240 000 personas y abría sus puertas 240 días al
año. Su diseño está copiado de los hipódromos griegos, y consta
de una pista rectangular con los extremos redondeados para facilitar
el giro de las cuádrigas, que debían dar en cada concurso 7 vueltas
alrededor de una spina.
Cuatro empresas se disputaban el precio en metálico, que tenían el
capital invertido en sueldos de aurigas, caballos, talleres de
reparación, establos...
• Teatro.
Se levantó a ras de suelo, diferenciándose del griego, que
aprovechaba la pendiente de una colina para acomodar el graderío .
El más representativo es el Teatro de Marcelo, situado en la
capital, con capacidad para 20 000 personas y fue imitado en todas
partes. En España se conservan 21 teatros como el de Itálica,
Segóbriga o Emerita Augusta.
Teatro romano de Mérida:
Los
conciertos musicales y recitales poéticos se celebraban en el odeón,
cuya estructura es similar a la de un teatro, pero de proporciones
reducidas para mejorar la acústica.
•
Anfiteatro.
Es la unión de dos teatros, y se convierte en el marco ideal de las
distracciones violentas. Se representaban cacería de animales y
enfrentamientos entre fieras salvajes, las ejecuciones de los
condenados y , en tiempo de persecuciones, los martirios cristianos.
Pero sobre todo, el mayor foco de atención y lo que recogía más
audiencia eran los combates entre gladiadores. También, en
circunstancias excepcionales se organizaban batallas navales
(naumaquias),
tras impermeabilizar el suelo y convertirlo en un estanque.
El
Anfiteatro
Flavio
es el monumento más grandioso de la Roma Imperial. Las obras
comenzaron en el año 72 por Vespasiano y las acabo Tito en el año
80, con cien días continuados de regocijos
En la fachada exterior se
escalonan los cuatro ordenes clásicos de la escultura greco-romana,
bajo las gradas corre un elaborado sistema de pasillos abovedados que
posibilita al público acceder y desalojar fácilmente la localidad,
y en la arena se hunde un foso subterráneo con jaulas de fiera,
enfermería y depósito de cadáveres, que se techa con tablazón de
madera. Un destacamento de marinería protegía a los asistentes del
sol.
Reconstrucción del Anfiteatro Flavio:
Anfiteatro Flavio en la actualidad:
•
Termas.
Era un gran complejo deportivo que el romano frecuentaba por razones
de higiene corporal, como mantenimiento de la salud física y
cultivo de las relaciones sociales. Son obras de ingeniería avanzada
que responden a un diseño común, consistente en insertar las salas
de baño en el interior de un amplio espacio dorado de jardines,
gimnasios, pistas de atletismo y biblioteca. El núcleo, del
balneario lo constituye la pisca. En los flancos de distribuyen los
vestuarios o apoditerium
y las salas climatizadas por calefacción: tepidarium
y caldarium.
El
suministro de agua llegaba a través de los acueductos.
Acueducto Romano de Segovia:
•
Vivienda
doméstica. La
plebe y la clase media vivía en alquiler, los inquilinos se hacinan
en bloques comunitarios de pisos de cuatro o cinco plantas, llamados
insulaes.
La madera predominaba como material de construcción, acarreando
graves problemas de incendios y frecuentes amenazas de ruina. Estas
“colmenas” gélidas en invierno y cálidas en verano, se
distribuyen a lo largo de un pasillo , carecen de agua y la cocina y
las letrinas eran comunitarias.
Insulae romana:
Las
Domus
eran
amplias y lujosas mansiones unifamiliares de los patricios,
pavimentada de mosaicos y con decoración pictórica sobre las
paredes. El desarrollo interno de la vivienda es el resultado de
añadir a la casa tradicional con atrium
y tablinum.