Nos encontramos ante una obra de carácter arquitectónico, construido entre el 1284 a.C y el 1264 a.C
Ramsés II con la corona del Alto
Egipto y barba postiza.
Nefertari con atributos de la diosa Hathor, disco solar entre 2 altas
plumas y cuernos de vaca.
Ramsés II con la corona blanca del Alto Egipto y barba postiza.
Ramsés II con doble corona y barba postiza.
Nefertari con atributos de la diosa Hathor, disco solar entre 2 altas
plumas y cuernos de vaca.
Ramsés II con el nemes, la corona atef y barba postiza.
La puerta de acceso al templo se encuentra decorada con
cartuchos con el nombre del faraón y escenas de ofrendas del rey a las diosas
Hathor e Isis. El templo, en su planta, es una representación minimizada del
gran templo: una sala con columnas hatóricas, un vestíbulo con habitaciones
laterales y el santuario. El nicho de la parte posterior alberga una estatua de
la diosa Hathor, protectora del faraón.
La sala hipóstila, de 11x10.8 metros, mantiene el techo sujeto
por 6 pilastras hatóricas colocadas en 2 filas. Sobre la cabeza de Hathor se
encuentran las historias del rey o la reina, separadas por fórmulas de
adoración a seis diosas: Mut, Isis, Satis, Hathor, Anukis y Urethekau. La
decoración muestra una ofrenda de Ramsés II a Amón-Ra de un prisionero en
presencia de la reina y 4 escenas de ofrendas a Anubis y Hathor y de la reina a
Mut y Hathor.
Después de la sala se abre el vestíbulo que
da acceso al santuario, en el que se encuentra una representación
de la diosa Hathor saliendo de la roca, entre 2 pilares osiríacos, además de
las habituales escenas de ofrendas. A cada lado del vestíbulo aparecen 2
salas sin decoración, empleadas posiblemente como almacén de los
objetos dedicados a las ceremonias religiosas.
El templo está dedicado a Hathor, diosa del amor y la belleza, así como a su esposa favorita, Nefertari. Se onstruyó junto con el Templo de Ramsés II con la intención de impresionar a los enemigos del sur de Egipto y dar fe de la grandeza y poder del reino. La dedicatoria que se encuentra en la entrada del templo, lleno de imágenes de Nefertari y de sus hijos, basta para comprobar lo que sentía el faraón por su reina:
[...] Una obra perteneciente por toda la eternidad a la Gran Esposa Real Nefertari-Merienmut, por la que brilla el Sol.
Como hemos hablado de los espeos, también hay dos tipos más de templos egipcios:
El speos es una edificación funeraria combinación de templo e hipogeo, perforada en la roca. Hemispeos ("semicueva") es la denominación que reciben aquellos espacios arquitectónicos que tienen una fachada decorada y otra parte excavada en la roca.
Templos abiertos al exterior, sus partes entan divididas en avenida de esfinges, obeliscos, pilonos con banderolas, patios, salas hipóstilas, y el santuario.