Nos encontramos ante una obra arquitectónica conmemorativa romana, en concreto es el arco de Constantino, este arco fue uno de los famosos arcos triunfales. Su autor es desconocido y fue mandado a construir por el senado romano. Está situado en la Vía triunfal de Roma y está cerca del Coliseo y del arco de Tito. Es el monumento más significativo del arte tardo-romano.Fue
construido para conmemorar la victoria del emperador sobre Majencio
en el año 313. En el ático se lee la siguiente inscripción: "Al Emperador
y César Constantino, el grande, el pío, el afortunado, que por
inspiración de Dios, grandeza de espíritu y valor de su ejército, liberó
al estado del Tirano y de sus partidarios, el Senado y el Pueblo de
Roma dedicaron este arco de triunfo."
Este arco refleja el sentido de la utilización de la arquitectura
como testimonio de la grandeza y del poder. El arco reviste tal
importancia que se convierte él mismo en monumento. Los arquitectos
romanos parten de los monumentos helenísticos, pero mientras que éstos
eran concebidos para ser vistos únicamente desde fuera, el arquitecto
romano repite dos elementos y los une con un arco, creando un espacio
interior por el que se puede realmente pasar.
Está construído en mármol y utiliza materiales y piezas de obras anteriores. El arco de Constantino es un monumento de cierta elegancia compositiva, aunque se limita a repetir el tipo ya creado del arco triunfal con tres puertas: una mayor en el centro y dos laterales, con relieves sobre los arcos.
Consta de tres partes: podium, arcos enmarcados en pilares y arquitrabe coronado con un ático donde está la dedicatoria.
Algunos
relieves de este arco están sacados de otros arcos de triunfo. No se
sabe con exactitud por qué se utilizaron elementos de otros arcos
anteriores. Por
esto el arco de Constantino es interesante para estudiar la evolución
del arte romano: las columnas, de época flavia, están coronadas por
esculturas de los tiempos de Trajano, los medallones son adrianos y los
bajo relieves del ático aurelianos. Las bandas de los arcos laterales y
los zócalos son de la época de Constantino.
Éstos
últimos muestran ya un gusto casi idéntico al de la alta Edad Media.
Las figuras están recortadas con dureza sobre el fondo, para aislar unas
de las otras. Particularmente expresivas de la nueva sensibilidad son
las Victorias de los zócalos de las columnas, que sostienen trofeos
militares, mientras que a sus pies hay las figuras tradicionales de los
bárbaros prisioneros.
Nos
encontramos, pues, ante un arte más ávido de hacer comprender que de
convertirse en sensible. Es un arte muy intelectualizado que, en vez de
atender a la diversidad de formas que nos ofrece la naturaleza, prefiere
la uniformidad de las convenciones (personajes representados de frente,
tamaños en relación a su importancia jerárquica), un arte que prefiere
el grafismo del relieve, de la pintura o del mosaico a la expresión
volumétrica de la estatua, un arte para el que el cuerpo humano ya no es
la mayor maravilla, ya que es capaz de destruir sus proporciones para
expresar ideas que le parecen más importantes, como la de dolor,
autoridad...
A continuación vamos a ver imágenes detalladas del arco: