jueves, 2 de mayo de 2013

La Mona Lisa


Obra pictórica al óleo sobre tabla, de pintor italiano Leonardo Da Vinci perteneciente a principios del siglo XVI. Es una obra del Cinquecento italiano en el contexto del Renacimiento en ese país. Actualmente la obra se encuentra en el Museo del Louvre (París)
En la obra se representa a la mujer de Francesco Bartolomeo del Giocondo: Lisa Gherardini.
Son muchos los detalles y muchos los misterios y leyendas que han surgido sobre esta obra, pero intentaré ser lo más crítico e imparcial, y además, introduciré algunos misterios interesantes.

El rasgo principal de la obra será el rostro de la mujer, éste encierra a una mujer muy femenina, Leonardo sabe tratar muy bien ese aire de feminidad que le pretende dar a la obra. Sus ojos entrañan el misterio, nos encontramos ante una mujer misteriosa, sinuosa; ésto se ve en esos ojos entrecerrados, oscuros, mirando directamente al espectador. La sonrisa es el elemento más relevante, en él descubrimos a una mujer feliz, que goza de su estatus, y que refleja cierta maldad interior por todos los logros que consiguió (casarse con una de los hombre más ricos de Florencia). La sonrisa es extremadamente femenina, sutil, delicada, a la par que fingida. El pelo se encuentra pegado a la cabeza, dado que se deja ver un velo transparente cubriéndolo.
Otra parte del cuerpo donde podemos hacer comentarios son las manos, éstas se hayan una encima de la otra, y es muy interesante el escorzo que se observa en el dedo gordo de ambas manos, que simplemente se insinúa, pero que nuestro ojo crea de la nada. En las mangas se obervan pliegues muy interesantes y trabajados. Como vemos, Da Vinci hace un estudio psicológico en esta obra
En el paisaje se observa un fondo natural, con caminos, montes, lagos y un cielo nublado. En este fondo destacamos que la línea del horizonte a la izquierda y derecha de Lisa es desigual, en la parte izquierda de ella está más elevado que en su parte derecha.

Los colores son principalmente oscuros, únicamente se aporta luz en la piel y el rostro de Lisa y algo en el fondo, pero en general es una composición cromática bastante tenebrosa. Un elemento que no podemos obviar es la técnica del esfumato, por la cual Leonardo funde las formas y las figuras de la composición, aquí se observa con al imagen de la mujer y el fondo, que no tienen una línea definida que remarque las figuras, sino que se funden con el entorno.



No hay comentarios:

Publicar un comentario