Reconstrucción de la iglesia de la Natividad

Iglesia de la Natividad (351-365). Belén.

Estamos ante, una recreación de la planta y alado inicial del templo levantado sobre el lugar donde nació Nuestro Señor Jesucristo. Esta iglesia se trata de un Martyrium, este tipo de templo, es el que se levanta normalmente en los Santos Lugares.

El edificio es de planta basilical, con lo cual, cuenta en este caso con cinco naves, entre ellas, la central es más alta y ancha que las laterales, por su parte la cabecera, está rematada en este caso por una capilla octogonal en lugar de por un ábside, al tratarse de un Martyrium como antes se ha mencionado y en los pies encontramos un atrio porticado. Los muros realizan una función de cierre y a la vez sustentante, aunque esta esté compartida con las columnas en las naves. Además, la cubierta a dos aguas, está constituida por un armazón de madera, recubierto por las tejas. Encuanto a los vanos, debemos situar las portadas de acceso a los pies del edificio, además existen ventanas a varios niveles, que aportan mucha luz al interior. Las fachadas destacan pos su horizontalidad, y la austeridad, al no aparecer elementos decorativos, sino los vanos únicamente.

Encuanto a los elementos decorativos, hemos de decir, que todos ellos, son posteriores a la construcción del edificio, pues estos templos, eran en principio, obras muy austeras, con los cual no contaban con decoración pictórica o escultórica, si bien esta se añadiría a posteriori sobre todo en el presbiterio, al ser el lugar más importantes, aunque también en las paredes de las naves.

El edificio, está planteado para recibir a los fieles, con lo cual cuenta con unas increíbles dimensiones, en ellos, la planta central al ser la más importante es la más elevada y ancha, pues es la que se sitúa directamente en frente del altar, mientras las naves de la epístola y del evangelio, son más bajas y estrechas al situarse a los lados, además esta diferencia de alturas, propicia la apertura de vanos para la iluminación. Por su parte el presbiterio es más elevado y tiene forma de capilla octogonal, esto tiene en el caso de los Martyrium dos causas, en primer lugar que es el lugar más sagrado dónde se sitúa el oficiante y en segundo lugar que bajo su planta se alberga alguno de los Santos Lugares.

El espacio interior, excepto el atrio, se encuentra como ya hemos mencionado dividido en tres naves y techado por una cubierta. Por su parte la zona de mayor relevancia es la capilla octogonal que remata la cabecera a modo de presbiterio. Por su parte la función del edificio, era religiosa, pues albergaba a los fieles entorno a los sacramentos y oficios religiosos, por ellos se explican sus dimensiones. El interior es un espacio luminoso por la apertura de vanos en las paredes, además comparte en origen una relación entre espacio interior y exterior pues ambos eran muy austeros.

En el 313, tras la promulgación del edicto de Milán, se debe buscar un lugar de culto digno para el oficio religioso del cristianismo, por esta causa, se va a reutilizar la basílica romana, por su gran capacidad (debemos recordar que en origen este edificio de tres naves con ábside en la cabecera y portada a los pies, era el de impartir justicia y como lonja comercial).

Pero el problema, resurge de nuevo cuando estos edificios han de ser agrandados para poder recibir a más fieles, entonces, aparecen añadidos al modelo, como el atrio con la fuente en el centro, el transepto, que aportaba la forma de cruz latina o las torres campanario, además estas iglesias contaban con una sacristía y una prótesis, donde se preparaban las especies eucarísticas.

En Roma, destacan las cinco basílicas mayores de la cristiandad, todas muy remodeladas excepto Santa Sabina, estas basílicas son San Juan de Letrán, Santa María la Mayor, San Pablo y san Pedro del Vaticano.

Pero además en los santos lugares, las basílicas se construyen encabezadas por un martyrium , que es el lugar donde se encuentra la correspondiente reliquia de la vida o pasión de Cristo.