martes, 11 de noviembre de 2014

Gálata Ludovisi.

     Nos encontramos ante una obra escultórica, perteneciente al arte griego y en concreto al período helenístico. La obra se denomina Gálata Ludovisi.

                                     

     Se trata de una escultura exenta o de bulto redondo en la que observamos dos estatuas ya que son representadas de cuerpo entero, una de ellas de pie y la otra se encuentra sujeta por la primera figura. Al tratarse de una copia, esta realizada en mármol pero la original se encontraba realizada en bronce. Probablemente, la técnica de ejecución sea la talla, es decir, sobre piedra. Esta obra no esta policromada pero la original probablemente si lo estuviera. Por lo que podemos observar, las fueras provocan una sensación de suavidad debido al material con el que está realizado y su masa parece ser pesadez ya que se trata de una figura con grandes dimensiones.

     Es una obra que fue realizada para establecerse en una plaza pública, en la que el rey Atalo I decidió conmemorarla en el centro, junto a seis esculturas mas. Por lo cuál, posee distintos puntos de vista, teniendo en cuenta que pierden el punto de vista frontal en favor de su visibilidad desde todos los ángulos, con el propósito de que el observador las contemple desde cualquier perspectiva.

     Debido a que es un obra cuya composición es espiral, provoca una sensación de movimiento ascendente. También, se representa a la vez tensión a través de los músculos y gestos.

     Son dos figuras realistas, ya que en la que se encuentra "agachada" observamos cara de agonía en sus últimos instantes de vida. La figura que se encuentra de pie, representa un giro en su cuerpo con naturalidad y rigidez, mientras que la otra representa una torsión forzadas ya que se encuentra sujetada por la otra figura.

     El significado de esta obra es el asesinato de la mujer en manos de su marido para librarse de la esclavitud y mientras este sujeta el cadáver, gira la cabeza hacia su enemigo en actitud desafiante , al tiempo que se suicida, hundiéndose la espada en el pecho.

     La escultura original fue realizada por Pérgamo en torno al año 225 a.C y fue perteneciente a su Escuela. Se trataba de una figura de 211 cm. Este autor se inclinaba por temas patéticos, es decir, de sentimientos violentos.

     A continuación, podemos observar varias imágenes de distinto punto de vista de esta escultura:



     En la escultura helenística se ofrecen soluciones satisfactorias en el orden técnico e iconográfico. Como lo citado anteriormente en la obra: la carencia de punto de vista frontal en favor de su visibilidad desde todos los ángulos. Se resuelve también el problema de la torsión del cuerpo, con figuras girando es espiral, y surgen grupos complejos integrados por varios personajes: el repertorio iconográfico se amplía y la nómina de dioses es compatible con individuos de toda condición social. Se cultivan las tres edades de la vida: ternura de la infancia, la plenitud de la madurez y las carnes decrépitas del anciano. Los modelos pueden ser griegos o extranjeros, vestidos o desnudos y triunfa la alegoría.

Además de la Escuela de Pérgamo, existen otras tres mas que alcanzan la fama, como lo son las escuelas de : Atenas, Alejandría y Rodas.
La escuela de Atenas cultiva el retrato de los intelectuales. Sus talleres escultóricos dan vida a la escuela neoática. En ella, destacamos la figura de la Venus de Milo. Se trata de la obra más famosa del neoaticismo. Constituye una magistral adaptación de una afrodita atribuida a Lisipo. Representa un movimiento ondulante del cuerpo, dando vida y vibración al elegante y fino esquema del s. IV a.C.
La escuela de Alejandría mostró complacencia por los temas cotidianos y alegóricos. Destacamos la Alegoría del río Nilo, definida como un anciano recostado, que porta el cuerno de la abundancia y los símbolos de las tierras que sus provechosas aguas fertilizan.

La de Rodas, continúa con la vertiente dramática de la de Pérgamo, profundizando la emoción del sentimiento y acentuando el dolor. Sus creaciones más famosas son el Laoconte y sus hijos, realizada en Roma para decorar la Domus Aurea de Nerón. Fue realizada por Agesandro, Plydoro y Athenodoro. Dicha figura representa el castigo que Apolo infligió al sacerdote troyano Laoconte y a sus hijos por haberle ofendido, enviando dos serpientes que les asfixian.
De la escuela de Rodas también debemos destacar la Victoria de Samotracia, que desciende sobre la proa de un navío, agitadas las ropas por la fuerza del viento marino, para conmemorar un triunfo naval.

sábado, 8 de noviembre de 2014

Diadúmeno.

      Nos encontramos ante un obra escultórica, denominada Diadúmeno y perteneciente al arte griego.


     Se trata de una figura de bulto redondo o exenta. Es una estatua que representa una figura humana cuya posición es de pie.

     La obra es una copia romana en mármol, pero la original fue realizada en bronce. La técnica de ejecución es la talla sobre piedra. Al ser solo un copia, esta escultura no está actualmente policromada, pero la original si lo estaba, siendo una escultura brillantemente pintada, empleándose postizos en los bronces. Por lo que observamos de la figura y por el material que está compuesto, podemos deducir que posee una textura suave.

     Se trata de una figura en posición de movimiento, con sus extremidades superiores levantadas y una pierna más avanzada que la otra, actuando esta última de sostén: postura de contraposto. En ella, observamos también los otros dos principios que los griegos aplicaron a sus figuras: proporción armónica: siete cabezas y el principio de diartrosis: división entre el tronco y las extremidades, dentro del tronco marcaron nítidamente los pectorales, cintura y extremidades. Vemos en ella una figura realista. En la imagen siguiente podemos ver el principio de diartrosis:



     Se representa un atleta joven con una banda aplicada en la frente, el cuál se encuentra en el momento que se ciñe la cinta de los campeones atléticos. Posee una expresión de su rostro dulce, que ha sido interpretada como una concesión al arte espiritual de Fidias.

     La escultura fue realizada en el 430 a.C y se encuentra en el Museo Arqueológico en Atenas. La representación de este joven aún no estaba totalmente formada, y se hizo célebre por su precio de 100 talentos. Dicha obra fue realizada por el contemporáneo de Fidias: Policleto, un escultor de atletas en bronce y un teórico de la escultura. Su iconografía se enriqueció con la realización de esta obra.

     Entre las obras de Policleto también debemos destacar el Doríforo, un joven en actitud de avanzar, que porta la lanza en la mano izquierda, apoyándosela en el hombro. Fue fundido en bronce en el año 440 a.C y presenta los grandes logros de la escultura griega del siglo V.

     Junto a Policleto, cabe destacar la importancia de la presencia de Fidias en la escultura griega. Se trata del primer imaginero del arte clásico occidental. Sus creaciones ofrecen las características de imagen devota: hermosura de su rostro, honesto ademán y gallarda postura. En su catálogo destacan las tres imágenes de Atenea, con la advocación de Promakhos, Lemnia y Parthenos y el monumental Zeus, de Olimpia, que mereció ser incluido entre las maravillas del mundo antiguo. Ninguna de estas obras se conservan en la actualidad, pero son conocidas por copias y descripciones literarias.

     Dentro de la escultura griega, el principal problema que se plantea es la falta de piezas originales, como ya hemos podido deducir de las obras citadas anteriormente.
El bronce se convirtió en el material favorito a la hora de realizar estatuas exentas. Otro de los problemas que conocemos es la policromía, ya que todas las esculturas de mármol estaban brillantemente pintadas, empleándose además postizos en los bronces como: láminas de plata sonrosadas en los labios, incrustaciones de pasta vítrea en los ojos y rodetes de cuero para los pezones.

     Algo que no debemos olvidar dentro de las características de esta escultura debido a la importancia que los griegos le dieron y que ya hemos citado anteriormente en nuestra escultura del Diadúmeno son los tres conceptos que estos aplicaron a las estatuas: proporción armónica, principio de diartrosis y postura de contraposto.

viernes, 7 de noviembre de 2014

El carro de Helios surgiendo del Océano, Dionisos, Kore, Démeter y Hebe.

   
      Nos encontramos ante una obra escultórica perteneciente al arte griego, denominada El carro de Helios surgiendo del Océano, Dionisos, Kore, Démeter y Hebe.



     Observamos una escultura de bulto redondo o exenta. Se trata de un grupo de estatuas, es decir, representaciones de cuerpos enteros de varias figuras humanas. Esta escultura consta de una combinación de posiciones, ya que Hebe se encuentra de pie, Démeter y Kore son sedentes y Dionisos yacente.

     La obra es original, de ahí a que a las figuras les falten partes de sus cuerpos como por ejemplo las extremidades o la cabeza. Está construida de mármol pentélico. Las esculturas están talladas sobre piedra. Aunque no podemos apreciarlo debido a la antigüedad de las figuras, estuvieron policromadas. Por la sensación visual, podemos pensar que las figuras constan de una suave textura. En estas figuras deducimos una sensación de pesadez debido al material y el volumen de ellas.

     La escultura anteriormente se encontraba en un marco arquitectónico, cuyo punto de vista era único y frontal. Fueron creadas para decorar el frontón de las columnas. Al encontrarse anteriormente en esos lugares, las esculturas recibirían luz natural.

     En las figuras observamos la representación del movimiento de cada una de ellas. En Dionisos por lo que vemos deducimos que se encuentra en postura de espera o de contemplación, y por lo que sabemos, concretamente se encuentra contemplando el carro del Sol. En las figuras sedentes de Démeter y Kore observamos sus extremidades levantadas y en la figura de Hebe vemos como extiende uno de sus brazos.

     Dicha escultura tiene su significado en la contemplación del carro del Sol, que surge del océano al despuntar el alba anunciando un nuevo día. Enfrente se encuentran Hestia, Dione y Afrodita que observan como el carro de la Luna se hunde en el Océano tras haber brillado durante toda la noche.

     Esta figura consta del año 438-432 a.C. La situamos en el arte griego, formando parte de la estructura del templo griego: el Partenón. Actualmente se encuentra en el Museo Británico de Londres.  
   
      Observamos como las telas de los vestidos se pegan al cuerpo dejando traslucir la anatomía, lo que da origen a una técnica que los arqueólogos han apodado de "paños mojados" y que los diseñadores actuales de alta costura han rebautizado como transparencia.
   
     También debemos destacar otras esculturas que han formado parte del Partenón como: el Nacimiento de Atenea. Se situaba en el frontón oriental de este templo. En ella vemos como la joven Niké está coronando a la diosa mientras Hermes y Hefaisto corren despavoridos ante el extraño alumbramiento. Estas imágenes se han perdido, pero conocemos la escena por descripciones literarias y por el dibujo que en 1674 realizó el pintor Carrey. También conocemos el Patronato del Ática. Formaba parte del frontón occidental del Partenón, y al igual que la anterior, de ella solo poseemos una maqueta en el Museo de la Acrópolis en Atenas. Observamos como se representa la elección del Patrono del Ática en la cuál quedaron finalistas del concurso Poseidón y Atenea.

     No debemos olvidar hablar de la obra arquitectónica nombrada anteriormente: el templo griego: el Partenón. Se trata de un templo octástilo, anfipróstilo y períptero que sigue siendo el emblema universal del arte griego. Se concibió como expresión del agradecimiento que sentían los atenienses por la diosa Atenea. Fue construido por los arquitectos Ictino y Calícrates y bajo la supervisión general de Fidias. Se trata de una obra diseñada para ser observada a distancia y consta de una estructura muy simple con una sala rectangular o naos, que alberga la efigie divina, procedida de un pórtico delantero abierto o pronaos, y secundada en el extremo opuesto por otro pórtico cerrado llamado opistódomo. El núcleo longitudinal y simétrico se eleva sobre una plataforma de tres gradas, donde el peldaño superior o estílobato aguanta el peso del edificio.

lunes, 27 de octubre de 2014

Naveta dels Tudons








Nos encontramos ante una obra arquitectónica, concretamente con la Naveta dels Tudons localizada entre el 2000 y el 800 a.C. La encontramos en Ciudadela en Menorca. Pertenece a la arquitectura ciclópea de las Islas Baleares.



Las navetas, así llamadas por el parecido que guardan con un barco invertido, son construcciones longitudinales con fachada de acceso plana y ábside semicircular. Este modelo era utilizado dentro y fuera de los poblados de las islas Baleares como casa de los vivos y casa de los muertos. Las “navetas de habitación” fueron viviendas domésticas de uso familiar, con un espacio interior habitable de unos 70 metros cuadrados, presidido por el hogar y el molino de piedra. Las “navetas de enterramiento” son sepulcros colectivos que constan de un pasillo que finaliza en una o en dos cámaras sepulcrales.

En esta obra arquitectónica el material empleado es la piedra. Está compuesta por 14 metros de longitud, 6'5 metros de anchura y 4'30 metros de altura.

En la arquitectura ciclópea de las islas Baleares también podemos destacar los talayots que fueron torres-vigías aisladas o integradas en el circuito amurallado de los poblados, cuyo interior se aprovecha como depósito para almacenar y redistribuir la carne. También podemos destacar las taulas, por su parte, debieron estar relacionadas probablemente con prácticas ceremoniales. Ello se deduce de las ofrendas de animales sacrificados que se han encontrado a su alrededor y la hoguera que ardía delante; están formados por un soporte vertical y otro horizontal, que se eleva en la zona principal del asentamiento.

 

Cámara de ofrendas de la tumba de Nefertari







Nos encontramos ante una obra pictórica, concretamente con la cámara de ofrendas de la tumba de Nefertari, localizada en el Valle de las Reinas en Tebas. Situamos esta obra en 1265 a.C.



Esta obra es una pintura parietal, pintada en la cámara de ofrendas de la tumba de Nefertari, esposa de Ramsés II. En el muro izquierdo escena y fórmula escrita de la petición de Nefertari a Thot, de cabeza de ibis, dios de la escritura y del saber, para que le proporcione tinta y recado de escribir que necesitará en el otro mundo. En la otra pared la reina hace una ofrenda de paños y pieles a Osiris.

Esculturas y pinturas se concibieron para decorar tumbas y templos. Las imágenes de los dioses y los faraones tendieron al hieratismo, mostrando mayor vivacidad las escenas civiles. Los materiales utilizados fueron basalto, granito, caliza y madera: y la policromía quedó estandarizada en carnaciones tostadas para los hombres y amarillentas pálidas o rosadas para las mujeres. Las pelucas eran negras y las vestimentas blancas.

Los egipcios se distinguieron de las demás civilizaciones fluviales contemporáneas por buscar deliberadamente el canon de belleza ideal del cuerpo humano. Sintetizaron tres conceptos: la armonía de las proporciones, la ley de frontalidad y la visión rectilínea. Estos fundamentos se consideraban de origen divino.

El cuerpo humano debía estar armónicamente proporcionado, ofreciendo un acorde perfecto entre sus partes. Luego, decidieron que el puño del módulo regulador y codificaron la longitud perfecta del individuo en 18 puños distribuidos de la siguiente manera: 2 para el rostro, 10 desde los hombros hasta la altura de las rodillas y los 6 restantes para las piernas y los pies.

El segundo precepto inmutable de la plástica egipcia fue la ley de frontalidad. Como bien podemos obsevar en nuestra pintura los hombros y las caderas de las imágenes representadas presentan una línea recta.

La tercera de las normas, llamada visión rectilínea, afectó solo al relieve y a la pintura. Para los egipcios, todas las figuras estaban compuestas a partir de cuatro puntos de vista: uno frontal, otro dorsal y dos laterales. El resultado fue un plano en el que se insertaba de frente, el ojo y el tronco, y de perfil, la cabeza y las extremidades.

domingo, 26 de octubre de 2014

Estatua Sedente de Kefrén

Estatua sedente de Kefrén (2558-2532 a.C.)
Diorita.168 cm. Museo Egipcio, El Cairo.

    
    Nos encontramos frente a una escultura de bulto redondo, se trata de la estatua del Faraón Kefrén y aparece de forma sedente, Además en el asiento donde aparecen a sendos lados unos bajorrelieves a modo decorativo, donde se pueden apreciar entrelazadas la flor de loto y el papiro que simbolizan la unión del alto y el bajo imperio.

    La estatua, está esculpida en piedra, más concretamente diorita y se nos muestra sin policromar pudiéndose observar el color natural de la roca. En el acabado, la escultura presenta suaves líneas curvas aunque predominan las rectas, el modelado suave, produce en la persona que la contempla una sensación de armonía, además al estar el material pulimentado se produce también una sensación de suavidad. Al aparecer la escultura con una gran peana y de forma tan hierática, produce una sensación de mucho peso.

    Por las formas de la escultura, podemos ver que estaba pensada para su visión frontal, con el pulimentado de la superficie, tenemos también que tener en cuenta que el efecto de la luz sobre la escultura produciría un brillo en esta.

    La línea de composición de la escultura es vertical al destacar el hieratismo predominante en ella, los relieves al ser simplemente una representación de elementos vegetales entrelazados carecen de expresividad más allá de la simbología antes mencionada. Observamos como además se trata de una representación del faraón en reposo al aparecer sentado, aunque se puede observar la predominancia de la tensión en su gesto y posición. Podríamos apuntar además hacia una idealización o más concretamente una deificación de la figura del faraón.

    En otro orden de cosas, podemos ver como en esta escultura se pueden apreciar los dos parámetros usados en la escultura egipcia, en primer lugar una proporción de dieciocho puños en las medidas, así como la ley de frontalidad que nos invita a contemplar ka escultura solo de frente apareciendo en una linea recta hombros y caderas.

       

viernes, 24 de octubre de 2014

Planta y alzado de la cueva del romeral antequera



La imagen que vamos a comentar es una arquitectura megalítica.









Representa el dibujo de una sección de una construcción megalítica. El título de ésta es la cueva del Romeral, situada en Antequera cuyo autor es desconocido. Esta construcción la podemos situar en la época del Megalitismo, concretamente en el 3.000 a.C. La tipología de este edificio es funeraria ya que se trata de un sepulcro de corredor.

Ofrece una cámara mortuoria circular otholos a la que se accede a través de una galería. En la tumba de cámara y corredor se añade a la estructura dolménica un pasillo de acceso, normalmente más bajo, también adintelado. En el caso de que se trate de un tholos, se construye con aparejo de mampostería en seco y la cubrición se cierra por aproximación de hiladas. En ocasiones se recurre a una solución mixta combinando ortostatos y mampostería. La primera galería del Romeral tiene 23,50 metros de largo, 1,70 metros de ancho y 1,85 de alto, desembocando en una primera sala circular de 5,20 metros de diámetro y 4 de alto. De ella parte un pequeño pasillo que termina en una segunda estancia circular de 2,30 metros de diámetro, y 2,40 metros de alto, en la que se conserva parte de una losa horizontal que pudo hacer las veces de altar de ofrendas. La cueva está construida en el interior de un montículo artificial, con pequeñas lajas de piedra caliza que forman una menuda mampostería, junto a grandes bloques; las salas circulares presentan cúpulas de aproximación de hiladas con una gran losa en su centro, mientras que los corredores lo hacen directamente con grandes lajas de piedra.


La arquitectura megalítica, eran construcciones impresionantes por el tamaño de los elementos que componen la figura, megalítica significa gran piedra. Su arquitectura se basaba en funerarios y prácticas religiosas, por eso se centran en hacer tumbas, cuevas, entre otros.

Entre sus monumentos, están los siguientes:

Dólmen: Es un monumento, formado por dos grandes losas de piedra que soportaban una piedra plana, algo como un techo.

Menhir: Es una piedra recta y alargada, ubicada en forma vertical, es de gran tamaño.

Naveta: Era un sepulcro colectivo, formado de piedras en técnica ciclópea, está técnica quiere decir que estaba construida sin cemento.

Talayot: Es una construcción en forma de torre, era un momento funerario.

Taula: Era un cementerio en forma de herradura y en la parte de arriba tiene una piedra central, parecida a una mesa. Por esto se llama "Taula", en catalán significa mesa.

Crómlech: Formado por piedras clavadas al suelo, formadas en algo circular, cercando un territorio.