viernes, 11 de marzo de 2016

Tumba de Giuliano de Medici

Nos encontramos ante un elemneto arquitectónico decorado con esculturas. Podemos dividir la imagen en dos: En la parte de abajo, nos encontramos con dos esculturas sobre un pedestal decorado en su parte superior con un frontón curvilíneo, decorado con volutas, que comienzan en las esquinas y terminan un poco antes, creando así un espacio entre las dos volutas.La escultura de la derecha representa a un hombre con una clara postura en movimiento, cuerpo musculado y tapado unicamente por un paño. Vemos como la cara de la la esculrura utiliza el "non finito".La escultura de la izquierda representa a una mujer en postura pensativa, con una clara disposición de movimiento, una gran musculatura,(igual de portentosa que la del hombre), cuerpo completamente desnudo y situada sobre una cabeza(parte superior del cuerpo) y un ave(parte inferior). 
Centrandonos en la parte media-alta de la imagen podemos observamos una figura central(en el interior de un falso vano)flanqueada por columnas adinteladas y acanaladas y otro dos falsos vanos(uno a cada lado) rematados con un frontón curvilíneo. Centandonos en la figura central, podemos observar a un hombre sedente, con una postura de contraposto, un rostro serio y sereno y , debido a su toracato(donde se observa una gran musculatura), vemos que es un jefe militar.

Aplicando la teoría, descubrimos que se trata de la tumba de Giuliano de Medici, donde se reperesenta la noche(hombre) y día(mujer), que se encuentra en la basílica de San Lorenzo, en Florencia(Roma). Esta obra es realizada por Miguel Ángel Buenarroti entre 1526 y 1534.

Historia: Cuando Lorenzo de Médicis el Joven murió en 1519,se decidió usar la Nueva Sacristía de la Iglesia deSan Lorenzo de Florencia, como capilla funeraria de la generación
joven de la familia, de la misma forma que la Sacristía Vieja había sido usada para la anterior generación (Lorenzo el Magnifico, y Giuliano). Fue ideada por el cardenal Julio de Médicis y el papa León X.
Miguel Ángel empezó a construirla en 1521, y en 1524ya había concluido la bóveda; sin embargo, la expulsiónde los Médicis en 1527 y el asedio de Florencia provocaron unnotable retraso en las obras. La partida definitivade Miguel Ángel de Florencia, en 1534, hizo que la obra quedara incompleta:el artista logró terminar solamente dos de los cuatro monumentossepulcrales, la tumba de Lorenzo, duque de Urbino,(muerto en1519) y la tumba de Juliano de Médicis, duque de Nemours,(muerto en 1516).Originalmente había planeado unir estas cuatro tumbas en una estructura exenta, concebida como obra masiva de  arquitectura. Los cuatro sarcófagos habían estado colocados sobre los cuatro arcos mientras la tumba del Cardenal Giulio Médicis,había sido colocada bajo el crucero).Se renunció a este proyecto a favor de las dos tumbasdobles en cada pared lateral, una para los Duchi (los jóvenes) y la otra para los Magnifici (los viejos),mientras que la pared de la entrada, frente al altar, será adornada con una Madonna flanqueada por las estatuas de los Santos patronos de la familia Médicis, Cosme y Damián. Los muros laterales, se consagraron a los Duchi, mientras la sacra conversazione de la pared de la entrada se añadió a las tumbas de los Magnifici en una composición unificada.

Miguel Ángel: El modo cómo molduró Miguel Angel las paredes de la Sacristía Nueva de San Lorenzo de Florencia para albergar en los costados dos sepulcros-retablo crea un ambiente enrarecido y fúnebre gracias a la dicromía de los mármoles y la tensión en que comprime en hornacinas angostas las estatuas simbólicas. En el sepulcro de Lorenzo, duque de Urbino, fallecido en 1519, sentado en meditabundo silencio y brazo retorcido en espiral, glosa la introspección del Pensamiento y exalta la vida contemplativa -se adecúa al dictado de Pensieroso como ha sido llamado-, en contraste con la actitud gallarda y activa de su hermano Juliano, duque de Nemours, en la tumba frontera. Dos alegorías, masculina el Crepúsculo, y femenina la Aurora, se deslizan como el transcurrir del tiempo efímero sobre el plano inclinado del frontón roto, imagen de la vida truncada del efigiado, como en el otro sepulcro el Día -de rostro non finito- y la Noche también lo rubrican. Es notorio el inacabado o non finito de los dos rostros masculinos, especialmente en el Día, que es aquí deliberado intento del artista por escamotear al espectador sus caras heridas por el resplandor solar, técnica que al extremo opuesto del esfumado praxiteliano, adquiere carácter pictórico y romántico luego seguido entre escultores tan dispares como Rodin o Victorio Macho.
 Miguel Ángel creó las Alegorías del Tiempo, un tema ligado al recuerdo, que simboliza el triunfo de la familia de los Médici en el transcurso del tiempo. Las cuatro alegorías están añadidas por encima de los sepulcros, a los pies de los duques. La línea elíptica sobre la cual se apoyan es una invención miguelangelesca que anticipa las curvas del barroco como en los escalones de la Biblioteca Laurenciana y en los arcos del puente Santa Trinidad. Para la tumba de Juliano de Médici ejecutó el Día y la Noche; para la de Lorenzo el Crepúsculo y la Aurora.(mecionado anteriormente)
El Día
La Nocche






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